Conducción Segura

Qué podemos hacer para aumentar la seguridad en la conducción.

En la conducción de un vehículo hay dos reglas aplicables a cualquier conductor, que deben tenerse siempre en cuenta para aumentar la seguridad al volante. La primera regla es tener respeto a la carretera, ya que supone uno de los entornos donde mayor número de víctimas hay todos los años. En segundo lugar, siempre se recomienda la prudencia como el mejor método para evitar accidentes, ya que en buena parte, la probabilidad de tener la responsabilidad de que se produzcan es nuestra.

Efectivamente, podemos aumentar la seguridad en la conducción y reducir las probabilidades a casi el mínimo de que se produzca un accidente, si tenemos en cuenta ciertos hábitos y consejos que nos pueden ayudar a trasladar la prudencia a nuestra forma de conducir. Estos son algunos de los consejos prácticos más útiles en este sentido:

- Evitar las distracciones al conductor

Es bastante frecuente que se vincule el teléfono móvil a las distracciones en la conducción. Lo sorprendente es que sigue habiendo una gran cantidad de conductores que en semáforos o incluso en marcha envían mensajes, marcan números de teléfono o llegan a consultar apps, lo que supone una pérdida notable de concentración en la carretera.

Pero no son las únicas distracciones. En ocasiones ir con otros pasajeros ayuda a mantenerse activo en una monótona carretera, pero también pueden motivar una distracción imprudente, sobre todo por discusiones o conversaciones entre pasajeros de los asientos de detrás y el conductor.

De hecho, también los niños pueden suponer una distracción. Si se va con más pasajeros, debe acordarse previamente quién debe cuidarlos, atender a sus necesidades o incluso trasladarles la necesidad de dejar al conductor la máxima concentración.

- Adoptar una actitud adecuada en la conducción

Conducir sin prisas y con un estado calmado es uno de los consejos más frecuentes para una conducción sin riesgos, ya que nos ofrece mayor concentración. En ocasiones, sobre todo en atascos, se recomienda poner música relajante, también sirve cualquier música que sea del agrado siempre del conductor, pero que no motive estrés ni desconcentración.

- Asegurar un estado óptimo como conductor

Las reglas son muy básicas. La conducción requiere de máxima concentración, por lo que se debe estar hidratado, bien alimentado y, sobre todo, no haber pasado sueño.
Por descontado, parar frecuentemente en viajes largos y reponer energías o incluso descansar lo que sea necesario son elementos imprescindibles, para que el conductor pueda ofrecer el 100% de sus reflejos al volante.

- Confirmar el estado óptimo del coche

Tanto las revisiones de mecánicos profesionales, como las personales con respecto a las luces, la presión de los neumáticos y el resto de elementos del vehículo (incluidos los sistemas electrónicos y de seguridad interna) deben seguir una revisión constante.

Su correcto funcionamiento nos ofrece una mayor seguridad, tanto en nuestra conducción como ante cualquier imprevisto que se nos aparezca.

- Consultar el estado óptimo de la carretera

Finalmente, además del conductor y del vehículo hay un tercer elemento que afecta directamente a nuestra seguridad, el estado de la carretera. Antes de cualquier viaje, la consulta del estado de las carreteras nos ayudará a evitar sorpresas durante la conducción.

Este consejo, además, es de extrema necesidad en temporadas de lluvia, frío o nieve, pues pueden motivar la necesidad del uso de cadenas o incluso cancelar el viaje a través de esa carretera, algo que con suficiente antelación puede salvarnos la vida.