TODOS LOS DÍAS ME ACUERDO QUE VOY A MORIR

Hay una cosa que todos compartimos, la única certeza que tenemos en la vida: todas vamos a tener un último día. Eso para mi, ya es motivo suficiente para tener una vida más significativa.
¿Nunca tuviste esa emoción de querer probar algo nuevo pero el miedo te frenó? Y después pensás: "Y si mañana no despierto, ¿habré aprovechado lo suficiente?".
Morir cada día significa que hoy puede ser tu última oportunidad de cumplir un deseo, de abrazar a tu papá, de tener un hijo, de perdonar o de encontrar al amor de tu vida.
Vengan conmigo, descubramos juntos por qué recordar nuestra mortalidad puede ser, paradójicamente, una de las maneras más hermosas de celebrar la vida.