Mercedes Sosa (Al jardín de la república - Cuando tenga la tierra - De mí)

Описание к видео Mercedes Sosa (Al jardín de la república - Cuando tenga la tierra - De mí)

Cierre del ciclo de recitales gratuitos Argentina Vivo 2, realizados en el año 2001.

(Comentario de "Página 12")

(...)
Mercedes devuelve el cariño, explícito y tácito, que ha recibido con un recital notable, en que no se da respiro, como si en lugar de 65 años tuviese 25. El escenario es de película: una isla, entre dos brazos de un riacho, con el público desparramado en la ladera de un cerro, mientras cae la tarde, y sol y luna se enfrentan en el cielo, que a la vez se empecina en amenazar con lluvia. Hace frío, por momentos demasiado: el guitarrista Colacho Brizuela tiene los dedos entumecidos y la corista Beatriz Muñoz tiembla como una hoja cada vez que baja del escenario. La altura hace su faena silenciosa sobre los músicos: uno a uno van bajando, a escondidas del público, para que un médico les ponga una máscara de oxígeno que les devuelva el aliento. Todos menos Mercedes, que allá adelante es un tractor, yendo y viniendo por un repertorio ecléctico, en que conviven temas de Los Hermanos Abalos y Charly García, de Manuel J. Castilla y Fito Páez, de Violeta Parra y León Gieco, de Teresa Parodi y el Cuchi Leguizamón. Su voz cargada en "Gracias a la vida" es conmovedora. La gente agita pañuelos en las zambas. Arriba de los cerros circundantes, pastoras de cabras que raramente bajan al poblado parecen vigilar la ceremonia. Liliana Herrero y Mercedes cantan entonces "Doña Ubenza", la historia de la pastora que no cree en Dios, pero se persigna por si acaso, no vaya a ser que después le toque el infierno. Después, hacen "Bajo el sauce solo", una perla. La entrerriana tiene los ojos húmedos y un temblor la recorre y no la deja en paz cuando pasa su momento de gloria. Llueve, pero Mercedes no para. Apenas mira el cielo, con su gesto de Pachamama, y dice: "Si tantas veces que llovió paró...¿por qué no para ahora?". Sus sobrinosClaudio y Coqui Sosa, y Tucuta, se han alternado como invitados, todos con caras de cumpleaños.
Hacia el final, Mercedes cuela en el repertorio, como en una inspiración, "Cuando tenga la tierra", una de los temas más combativos del folklore de los 70. Explica brevemente que tardó mucho tiempo en volver a cantarlo después de su exilio durante los años de plomo, pero que cada vez que lo hace se siente otra vez conmovida, posesionada. Es posible que en las ciudades el tema suene hoy excesivo. En Santa Catalina, donde todos son campesinos,y la tierra es todo lo que se tiene, y es árida, y ajena; su sentido está claro. El crescendo del final envalentona a seis pibes del público que, bandera en manos, se meten al río y se acercan al escenario. Uno, con una camiseta de Charly García y aspecto de haber estado ayer en Woodstock, se envalentona, corre hacia adelante, trepa y llega al escenario. Mercedes se deja besar y astutamente camina hacia la otra punta, a la espera de que la seguridad lo retire. Pero no hay seguridad. El pibe se saca la remera, baja, corre, pasa por el río otra vez y se va a besar a su chica, con los ojos colorados. Un segundo después, un puñado de tristes uniformados se paran en cordón frente al río. Mercedes termina su set, baja del escenario y se desploma en un silla, detrás del escenario. Le dan oxígeno, ahora sí. Ya no parece una mujer imponente manejando los hilos de todo. Se la llevan como a Antoñito El Camborio, entre cuatro, rumbo a una camioneta. Un periodista de TN le hace unas preguntas apuradas. Mercedes contesta como sonámbula. Dice otra vez que está tan emocionada que no puede razonar. (...)

http://www.pagina12.com.ar/2001/01-03...

Комментарии

Информация по комментариям в разработке