Madrileños por el mundo: Madagascar

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La cuarta isla más grande del mundo, en medio del océano Índico, acoge a Madagascar, un país que a pesar de su pobreza es un potente productor de arroz y especias como canela o vainilla, y que ofrece una fauna y flora espectaculares. Y ojo, son campeones del mundo de petanca. Vamos a descubrir este destino tan desconocido de la mano de nuestros madrileños.

Quedamos con Manu en el lago Anosy, símbolo de la capital del país, Antananarivo, y nos movemos por la locura de calles del centro de la ciudad, donde sólo hay dos semáforos. Manu nos habla de la inestable situación del país, que sufrió un golpe de Estado en 2009, en el que la pobreza se percibe en todos los rincones y la corrupción lo infecta todo.

Visitamos el Palacio de la Reina, uno de los pocos edificios históricos de la capital, y el café de La Gare, un local "chic" para expatriados y malgaches con dinero.

En las playas de Mangily, al suroeste de la isla (¡dos días de viaje en coche desde la capital!), nos espera Olga. Con ella nos acercamos a la barrera de coral, la cuarta más grande del mundo, que protege contra el oleaje y los tiburones. Allí podemos disfrutar de unos fondos marinos espectaculares.

Después conocemos Tulear, la capital del sur, una ciudad que quedó semiderruida tras el paso de un huracán en 2009. Montamos en carro tirado por cebúes, la vaca típica de esta zona del país, para entrar en el bosque de los baobabs, el árbol sagrado y milenario que acumula agua en su interior, y que forma parte de la literatura infantil, ya que aparecía en 'El Principito' de Saint-Exupéry.

En el Parque Nacional de Andasibe-Mantadia (al este) quedamos con Enrique, que dejó su trabajo de ingeniero para montar una empresa de recepción de turismo. Nos adentramos en plena selva para observar lemures, unos curiosos primates endémicos de la isla, de los que existen 100 especies.

Nos acercamos al mercado de Mahazo, donde se puede encontrar de todo, y conocemos algunas costumbres malgaches como las peleas de gallos o la costumbre de pasar el día en el río aprovechando que hay que lavar la ropa a mano.

El seleccionador del equipo nacional femenino de baloncesto es madrileño. Ángel Manzano entrenó a equipos españoles durante 25 años y en 2009 quedó prendado del país. Además montó una ONG que organiza campus de baloncesto con estudiantes españoles en Estados Unidos. Con él visitamos el popular mercado de Anarakely, de nuevo en la capital, Antananarivo, y los barrios más pobres, donde Ángel realiza una importante labor en la mejora de la educación de los niños más necesitados.