Hipermetropía en niños: ¿en qué consiste y como les afecta? | Clínica Baviera

Описание к видео Hipermetropía en niños: ¿en qué consiste y como les afecta? | Clínica Baviera

Para más información sobre este tema consulte: http://www.clinicabaviera.com/

El Dr. Valentín Jiménez, especialista en oftalmología infantil de Clínica Baviera, nos explica qué es la hipermetropía infantil.

La hipermetropía es un defecto de refracción, como la miopía y el astigmatismo. Consiste en que el ojo es demasiado corto y las imágenes no quedan bien enfocadas en la retina. Por esta razón vemos desenfocados los objetos cercanos. Es habitual que cuando los niños son pequeños tengan algo de hipermetropía, un fenómeno que conocemos como hipermetropía fisiológica. Esto ocurre porque el niño tiene una gran capacidad de enfocar (una gran capacidad de acomodar) y es capaz de, con un pequeño esfuerzo de enfoque, compensar esa hipermetropía natural. El problema surge cuando la hipermetropía excede de ese rango (entre una dioptría y media y dos dioptrías al principio de la edad infantil).
El niño con hipermetropía suele tener dificultades en la visión cercana, dolores de cabeza o dificultades en la lectura. En ocasiones, los niños no son capaces de describir los síntomas que perciben pero demuestran el problema negándose a leer o a realizar otras tareas de cerca en la que se les exija fijación porque están incómodos.
La hipermetropía infantil tiende a desaparecer con la edad. Tener entre una dioptría y media y dos dioptrías de hipermetropía se considera normal y normalmente este problema tiende a desaparecer. Si la hipermetropía es alta puede bajar con la edad, pero normalmente no llega a desaparecer.
Una hipermetropía mal corregida durante la infancia puede derivar en fracaso escolar o en dificultades en el colegio. También es más frecuente que los niños con hipermetropía, sobre todo si la hipermetropía es alta, padezcan estrabismo, es decir, tengan tendencia a torcer el ojo hacia adentro porque la hipermetropía les obliga a hacer un esfuerzo muy grande para enfocar, sobre todo cuando miran de cerca. Este esfuerzo para enfocar muchas veces lleva asociada la convergencia y el niño tiene más tendencia a tener estrabismo.
Si sospechamos que nuestro hijo padece hipermetropía debemos llevarle a una revisión y hacerle un estudio completo con la pupila dilatada para conocer su graduación real.
El tratamiento más habitual para la hipermetropía infantil es llevar unas gafas. Si la hipermetropía no es muy alta, se recomienda usar las gafas exclusivamente para desarrollar actividades que requieran esfuerzo visual. Si la hipermetropía es alta el niño debe llevar las gafas siempre. Cuando el niño es más mayor puede alternar el uso de gafas con lentes de contacto ya que será capaz de ponerse y quitarse las lentillas por sí mismo. Esto será en torno a los 10 años.

Комментарии

Информация по комментариям в разработке