Ucrania suspende el envío de gas ruso a Europa y tensa relaciones con su gran aliado

Ucrania detuvo el miércoles el suministro de gas ruso a los clientes europeos a través de su red de gasoductos, tras la expiración de un acuerdo de tránsito, previo a la guerra, al final de 2024. Este corte se produce casi tres años después de la invasión de Moscú a Ucrania. A pesar de la avanzada de las tropas rusas y los tanques sobre el territorio ucraniano en febrero de 2022, el gas natural de Rusia siguió fluyendo a Europa a través de la red de gasoductos de Ucrania, construida cuando ambos países formaban parte de la extinta Unión Soviética. Este acuerdo permitía a Gazprom, el gigante energético estatal de Rusia, ganar dinero con el gas para financiear la guerra, mientras Ucrania obtenía tarifas por el tránsito. Países de la UE como Eslovaquia, Austria y Hungría, han expresado su frustración con Ucrania tras la suspensión, señalando que Ucrania agrava la crisis energética en Europa. Estos países, que han tenido posturas más flexibles hacia Rusia que sus socios europeos, temen que las sanciones adicionales contra Moscú y el corte del gas lastren aún más sus economías.