La tradición, la cultura y el carisma único que tiene la Colonia Rusa de SAN JAVIER , Uruguay .

El próximo 27 de julio de 2022 la localidad de San Javier habrá de conmemorar los 109 años de la llegada de los inmigrantes rusos que dieron vida a esta localidad ubicada al norte del departamento de Río Negro, a orillas del río Uruguay.

Durante la segunda presidencia de José Batlle y Ordóñez se generó un proyecto de colonización para permitir que los inmigrantes que llegaban a nuestro país poblaran la campaña, por aquellos años poco aprovechada, y desde el gobierno se creía que el aporte del contingente extranjero sería fundamental para diversificar la producción.

Los fundadores de San Javier eran integrantes de un grupo religioso llamado “Nuevo Israel”, liderado por Basilio S. Lubkov, quienes luego de sufrir castigos y persecuciones en su país natal por parte de la iglesia Ortodoxa, amparada por el zarismo, deciden buscar un país alternativo que les ofreciera tierras para producir y libertad religiosa para poder profesar su religión.

Con el visto bueno de Basilio Lubkov a la propuesta gubernamental, en los primeros meses del años 1913 comienzan a llegar al puerto de Montevideo en distintos buques transatlánticos y a ser alojados en lo que por aquellos años se conocía como el “Hotel de los Inmigrantes”, pero que nada de hotel tenía, sino un lugar incómodo e insalubre para la cantidad de personas que comenzaban a generar el colapso del lugar.

Las tierras que el gobierno compraría para ser distribuida entre los inmigrantes no se concretaba; la demora en dar respuestas y la cantidad de rusos ya en Montevideo, hizo que se dieran algunos acontecimientos hacia mediados del mes de julio, cuando uno de los dueños de los campos de la sucesión Espalter ofreciera su fracción para este proyecto colónico. Su nombre: José Espalter.

Teniendo en cuenta la ubicación del lugar donde se establecerían, el gobierno dispuso que fueran trasladados desde Montevideo en dos buques de la Armada, el “Tangarupá” y el “18 de Julio”.
La mañana del 27 de julio llegan y desembarcan en un rústico puerto de piedras que la estancia tenía para uso particular.
Los fundadores de San Javier hicieron innumerables aportes al país, destacando la introducción del Girasol, el cual sembraron e industrializaron, construyendo en la nueva población, el primer molino aceitero de girasol del país.

Hoy la comunidad trabaja para mantener vivas las tradiciones heredadas de sus antepasados, cuidando y poniendo en valor viejos edificios que otrora fueran símbolo de trabajo y prosperidad.