Secuestrado y desaparecido. La historia de Diego que lleva 9 años sin justicia.

A Verónica una llamada le cambió la vida cuando un hombre le dijo que su hijo Diego, de 16 años de edad, había sido secuestrado, y que de no pagar una fuerte cantidad de dinero, jamás lo volvería a ver.

Diego Maximiliano, originario de Ecatepec, Estado de México, salió de su casa la tarde del 4 de septiembre de 2015 para reunirse con sus amigos, pero él no regresó a casa.

Ante la imposibilidad de pagar la cantidad exigida, los secuestradores de Diego le enviaron a Verónica una prueba de vida que coincidió con el ADN del joven.

En su desesperación, y luego de ver el daño que le habían causado a su hijo, Verónica entregó una parte del dinero que logró juntar con apoyo de amigos y familiares, y aunque los captores le aseguraron que le entregarían a Diego, no cumplieron su palabra.

A casi 9 años de los hechos, tres personas han sido detenidas, entre ellos un menor de edad, pero a pesar de que las investigaciones apuntan a que fueron quienes se llevaron al entonces adolescente, hasta ahora no han aceptado su participación en el hecho.