El gusto y el olfato durante el tratamiento de cáncer: cómo disfrutar de la comida

El tratamiento del cáncer o el cáncer puede afectar el sabor y el olor de la comida. Quizás no sientas el gusto de la comida o sabe rara. O el sabor es metálico, salado o muy dulce. A veces hay alimentos que no huelen ricos como antes.

Aunque no puedes evitar estos problemas, podrás aliviarlos. Sigue estos consejos para los cambios de sabor u olfato.

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¿Estás en tratamiento de cáncer y tienes cambios en el gusto o el olfato? Aquí tienes algunos consejos útiles del Instituto Nacional del Cáncer.  

Si no sientes el gusto de la comida o sabe rara, prueba alimentos afrutados, ácidos o salados.  Añade aderezos, hierbas, especias y salsas. 

Si el sabor es amargo, ácido o metálico, prueba frutas dulces o caramelos sin azúcar. No comas carne roja. No uses recipientes de metal ni cubiertos de plata.

Si sabe muy salado, usa condimentos con poca sal o sin sal, pon hierbas o especias en vez de sal, o añade una pizca de azúcar o miel.

Si sabe muy dulce, come vegetales en vez de frutas, añade agua a los jugos dulces, pon una pizca de sal a la comida y prueba alimentos ácidos o con poco sabor.  

Para controlar los cambios de olfato, evita los olores fuertes y elige alimentos sin cocción, como un sándwich. Cocina y come en áreas con buena ventilación.