Grasa vs musculo

Grasa vs Músculo

Hasta hace poco menos de cinco años, subir a la báscula me daba verdadero terror. En ese momento, yo me encontraba con un sobrepeso de 10 kilos. Podéis pensar que no es mucho, pues la verdad, yo en el espejo no me veía del todo mal, pero nunca estaba dispuesta a subirme a la báscula, pues inmediatamente después de ver casi los 70 kilogramos a los que me estaba acercando peligrosamente sufría el consecuente bajón emocional.

Inicio contando esto porque sé y me consta, después de estos casi cinco años dedicándome a asesorar a personas con su alimentación, que no soy la única a la que me pasaba. Y tengo que reconocer que a día de hoy a veces se me olvida que algún día sufrí de miedo, porque ahora, gracias a haber adquirido conocimientos y cambiado ciertos hábitos, he construido un cuerpo nuevo. Ahora, subir a la báscula se ha convertido en algo normal y que no me causa ningún apuro.

Pero os voy a decir algo más, no hace falta subirse a la báscula cuando buscas una mejora en tu composición corporal, pues en cierto modo nos engaña y puede convertirse en nuestro principal desmotivador. Eso lo he aprendido con la experiencia de tratar a muchas personas cuyo objetivo era bajar de peso. El objetivo principal, no debe ser bajar kilos en la báscula, sino bajar la grasa, que en muchos casos no se corresponde.

Un kilogramo de grasa ocupa aproximadamente el doble de volumen que un kilogramo de músculo.

Por lo tanto, si nosotros hacemos un programa para bajar de grasa y seguimos las indicaciones de nuestro asesor/a :
Reduciremos la ingesta de hidratos de carbono (malos) y grasas saturadas.
Aumentaremos la ingesta de proteinas saludable.
Beberemos más agua.
Empezaremos a ejercitarnos.

El resultado será que nuestro cuerpo:
Empezará a deshacerse de la grasa depositada.
Estará más hidratado.
-Comenzará a desarrollar masa magra (músculo)

¿ Qué quiere decir esto en términos de kilogramos?

Que probablemente a corto, medio plazo, nuestro peso se modifique poco o muy poco, pues la bajada en kilogramos de grasa, se compensará con la subida en kilogramos de masa muscular (recuerda que el músculo pesa más) y la aumento de la hidratación corporal (más líquido). Pues el agua representa el 80% de nuestra composición, por lo que un cuerpo más hidratado será un cuerpo con mayor peso.

Entonces, ¿Qué métodos emplearemos para saber si estamos teniendo resultados y por lo tanto que nuestro esfuerzo está valiendo la pena?

Por un lado tenemos herramientas como básculas de Bioimpedancia y medidores de pliegues, usadas normalmente por profesionales.

Yo en mi caso utilizo las primeras, pues sé que psicológicamente las personas necesitan saber los parámetros como grasa, músculo, masa ósea y demás que ofrecen este tipo de báscula.

Sin embargo, mi método favorito y el que para mi es fiable al 100% es la cinta métrica ( la de los costureros de toda la vida) o en su defecto la ropa (cinturones, camisetas, ropa laboral..). Ahí, no existe ni trampa ni cartón. Si has bajado de centímetros, si la ropa del trabajo te viene más holgada o si has cambiado de agujero del cinturón, ahí tienes la muestra de que has reducido grasa.

Por supuesto, esta afirmación esta basada en la hipótesis de que hayas seguido una dieta balanceada y bien formulada a nivel nutricional. Pues hay casos de dietas "extremas" que también tienen ese efecto en el volumen, además en plazos de tiempo demasiado cortos, pero donde mayoritariamente se pierde músculo y agua.

Por lo tanto, cuando te dispongas a hacer un programa para bajar la grasa y quieras llevar un control de tus resultados, te recomiendo hagas uso de un cinta métrica para medir tus volúmenes (cadera, cintura, muslo, pecho...).

No te peses todos los días. Eso creará obsesión y en muchos casos una frustración basada en un resultado que no es real, pues las variaciones de peso de un día a otro son múltiples. Nos afecta al peso lo que hemos comido ese día, la cantidad de líquido, el periodo menstrual, si hemos hechos o no deporte...

Yo te recomiendo te peses una vez a la semana o mejor cada dos semanas. De esta forma será más sencillo mantener la motivación que se requiere en estos casos.