¿Nos cuesta cuidar la vida interior? P. Manuel Prieto sm - 9 de junio 2024

Dom. X. T. O. c. B.
(Mc.3.20-35)
1.- Los escribas y acusan a Jesús de estar poseído por el espíritu del mal. Todo lo contrario. Jesús vive la presencia del Esp. Santo donde está la fuente de la vida y del amor que fluyen del Padre y del Esp.
Por eso Jesús es quien nos libera del mal, nos conduce a la verdad, nos impulsa a tender puentes de encuentro y reconciliación y todo por medio del E.S
2.- Nuestra realidad: El hombre de hoy ha perdido el sentido de la interioridad, el misterio de la vida y por eso vive de impresiones, de superficialidades y le cuesta entrar en su interior y descubrir ahí la presencia del Amor de Dios y la acción del Esp. Santo.
Viviendo así se incapacita para escuchar el misterio que se encierra en lo más hondo de su ser, de su existencia. Por eso nos cuesta cuidar la vida interior y todo eso hace que nos sintamos insatisfechos. Solo el Esp. S. nos puede ayudar a entrar en nuestra interioridad y dar plenitud a nuestra vida.
3.- ¿Qué sería pecar contra el Esp.? +No confiar en su acción en nosotros, +No creer en su amor + No dejarnos llenar de sus dones frutos y carismas. +Sería dejarnos esclavizar por el orgullo, el poder, el tener, el placer, las envidias, las críticas, calumnias. +No aceptar su presencia en nuestra vida. +Es cerrarnos a la acción de Dios en nosotros, es negar su actuar en nosotros.
4.- La plenitud del Esp. Santo: Si descubrimos que el Esp. Santo está en nuestra vida nuestras vidas aparecerán los rasgos del corazón de una madre; ternura, cariño, servicio, amor desinteresado…Estos son mi madre y mis hermanos Porque escuchan mi Palabra. Y dejan que el Esp. actúe en sus vidas
5. Cómo actúa el Esp. Santo: Despierta en nosotros el deseo de trabajar por un mundo mejor, más noble, más justo y humano. El Esp. Santo es quien hace brotar en nosotros; la alegría, nos enciende el amor por los demás, es un regalo, habita en nosotros, nos sana y renueva nuestra vida: Hoy podíamos orar así; “Señor no apartes de mi tu Espíritu”
6.- Nuestra sociedad es sana en la medida que favorezca el desarrollo de toda la persona. Jesús vivió la vida desde un horizonte amplio, donde caben todos. La Madre y los hermanos de Jesús son todos los que cumplen la voluntad De Dios.

P. Manuel Prieto sm