Una sesión de Terapia Acuática como es?

Una sesión de Terapia Acuática comienza con una entrevista, donde el cliente informa sus necesidades, como busca de alivio de tensión, dolor, trauma, malestar físico o mental.

El terapeuta llevará al cliente a la piscina. Este reconocerá el escenario terapéutico y se realizarán algunos ejercicios iniciales como el Ai Chi de dupla por exemplo, ou simplesmente una caminata en torno de la piscina.

El cliente se colocará flotando de forma cómoda y segura.

El terapeuta comienza a trabajar en la expansión de la respiración y de la caja torácica, el cliente puede sentirse más relajado y seguro com eso

Si existe alguna molestia, se interrumpirá la sesión según lo que sea favorable para el cliente.

Es importante que elle sepa que quien tiene el controle de la sesión es elle e pode parar e hacer cambios de acuerdo con sus necesidades.

Una vez que esté cómodo y seguro, el terapeuta trabaja partes específicas del torso que tienden a bloquearse, pegarse y tensionar.

El foco irá a la columna vertebral. Poco después, el terapeuta manipula, estimula o seda los meridianos energéticos de las extremidades superiores e inferiores.

En Terapia Acuática es importante establecer un alto nivel de confianza y entrega.

El cliente, sintiéndose cómodo, dará permiso para trabajar partes más profundas del cuerpo como músculos y líneas ligadas a las emociones.

En cada momento, el terapeuta identifica las necesidades reales del cliente através de una leitura física e energética y busca suplir y ayudar a encontrar el camino hacia el equilibrio físico, mental y espiritual.


El resultado esperado, pero sin grandes expectativas, es una gran liberación e desbloqueo físico, mental.

Un estado energético de bienestar supremo.

Un momento de iluminación que se puede mantener durante unas horas, días o semanas, según el estilo de vida de cada uno.