LA PLAZA DE LAS PLAZAS BARCELONESAS

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Lo que hoy es la plaza Catalunya estaba entre el baluarte y las torres de Canaletes ; la puerta de Isabel II (construida (1843) después de derribar el edificio del Estudio General) cerrando las Rambla; el baluarte de Jonqueres (hoy plaza Urquinaona) y el Portal dels Orbs (hoy Puerta del Ángel) donde se ponían los pobres y lisiados a pedir limosna junto a un mercado que se montaba cada día..

El Gobierno obligaba a que toda construcción fuera de la muralla debiera de ser provisional y fácilmente desmontable en caso de guerra en un radio de un 1 kilómetro, el equivalente a un disparo de cañón.

La explanada era un espacio de paso. De ella salían dos caminos hacia las poblaciones más cercanas: el Camí de Jesús, futuro paseo de Gràcia, que pasando por Gràcia llegaba a Sant Cugat y de ahí a Francia....y el Camí de Sarrià que discurría por la actual calle Pelayo .

A un lado de la plaza se abrió la estación de Martorell (1854), entre la Rambla Cataluña (hasta 1886) y la Ronda Universidad; y en 1862 empezó a operar la línea de los ferrocarriles de Sarrià.

Manuel Gibert i Sans, Presidente del Liceo y de la compañía del tren Barcelona-Mataró fue el primer vecino de la plaza.

La Casa Gibert (1861-95) fue inaugurada por la reina Isabel II y en su jardín se edificó el Teatro del Buen Retiro que ofrecía opera, zarzuela y dramas.

El empresario Ignaci Girona, padre de Manuel Girona, uno de los barceloneses más ricos de la ciudad, también quiso venir a vivir a ésta zona. Edificó CASA GIRONA (1863) y en sus bajos albergó uno de los primeros cinematógrafos y ya En 1937 el salón de baile Rigat. Casi enfrente de la Casa Girona estaba la Casa Rosich (1866).

Tocando a la Iglesia de Santa Ana Agustín Goytisolo (1874) edificó su vivienda. En sus bajos se abrió la Cervecería Munich (1890) y años después, el Restaurante Savoy (1925).


Tras derruirse la Estación del tren de Martorell (1884) se abrió la Ronda Universidad entre Balmes y Rambla Cataluña apareciendo los primeros edificios entre la hoy calle Bergara y el límite norte de la plaza.

Algunos propietarios habían alquilado los terrenos del centro de la plaza, que se llenó de barracas de feria como el Circo Ecuestre Alegría (1879-1895) el Panorama Waterloo (1888) o el Museo Anatómico de Francesc Darder...

... y el Salón Edison (1895), un barracón donde se hizo la primera proyección de imágenes animadas y el Panorama de Tierra Santa o el Gran Café del Siglo XIX, conocido popularmente como La Pajarera.

Se derruyó la Casa Gibert (1895) y las barracas de feria que aún quedaban, se trasladaron hacia el Paralelo. Hasta 1902 la explanada no quedó totalmente despejada.

El centro se ajardinó con plántanos y palmeras. Éstas eran tan pequeñas al plantarlas que los barceloneses ahora se referían a la Plaça del Apis.

Se instaló En el centro una fuente de ladrillo que manaba agua de Moncada (1917), se instalaron bancos y sillas y en sus laterales la Banca Arnús, que ocupaba el espacio dejado por la Maison Dorée.

La plaza se mantuvo más o menos igual hasta 1924 cuando en la superficie se instalaron las vías del tranvía y se empezó a perforar el terreno para crear la primera red de metro.

El nuevo proyecto para la plaza se adjudicó a Josep Puig i Cadafalch catalanista de pro pero Primo de Ribera eligió a Francesc de Paula Nebot .

Se construyó el edificio de Telefónica y la plaza remodelada se inauguró el 2 de noviembre de 1927 y la presidió el rey Alfonso XIII.

Con la Exposición Internacional de 1929 quedó soterrada la estación de Sarrià y en la zona de la plaza se instalaron los más lujosos hoteles, cafés, terrazas y restaurantes de la ciudad.

Con la dictadura se derribó Hotel Colón, para edificar el Banco Español de Crédito.

Después llegaron otros como el Banco Central, Banco de España, el de Vizcaya, de Bilbao... La plaza se convirtió en el centro financiero de la ciudad y desaparecieron casi todas las viviendas para dar paso a despachos y oficinas.

El alcalde Porcioles (años 60) mandó construir las dos fuentes, se terminó de pavimentar la parte central con el dibujo de una estrella enmarcada en un gran círculo y en el subsuelo se creó un gran aparcamiento.

y la Avenida de la Luz... que después fue eclipsada por la llegada de El Corte Ingles que se convirtió en la meca de las compras y visita obligada en Navidades cuando se engalanaba su fachada y, a sus puertas, los Reyes Magos esperaban las cartas de los niños.

El Triangle fue la última gran reforma de la plaza. Se derribaron una gran cantidad de edificios tocando a la calle Pelayo para crear otro gran foco comercial .
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